¿Por qué Laberintos de la Crianza?

Este sitio es un lugar de aprendizaje para todos los que queramos aprender cómo llevar a cabo una crianza respetuosa. pero no solo eso, es ser consiente de lo que estamos haciendo y dejar HUELLA en lugar de CICATRIZ en nuestros niños.

¿Cómo nació la idea?

Soy la primer hija de tres en mi familia, me convertí en la mayor cuando nació mi primera hermana, yo tenía 6 y por segunda vez cuando tenía 14.

Así como dicen que a cada hijo le toca una diferente versión de sus padres, pasa lo mismo cuando eres la hermana mayor. Cometí mucho errores y dejando muchas heridas por no saber ser la hermana mayor.

En mi caso con mi hermano pequeño que actualmente tiene 3 años soy una persona mucho más consiente del lugar y el impacto que causo en él con mis acciones y la forma en la que convivimos.

Me he hecho cargo de él en múltiples ocasiones, y aunque no ocupo el lugar de mis padres es importante estar informado sobre cómo lidiar con berrinches, qué hacer cuando lloran sin razón, técnicas para ayudarles a manejar sus emociones y mucho más.

Objetivo del blog:

Remarco que no soy experta en temas de crianza, lo que busco es compartir mis experiencias acompañada de información que yo investigue de fuentes confiables.

No se necesita ser padre para influir en la vida de un niño, yo como hermana he formado parte de lo que mis hermanos conocen como amor, compañía y responsabilidad, 

Aquí estarán datos y anécdotas que puedan ayudar a otros para el mejor desarrollo de sus niños.

Con el objetivo de crear un lugar en el que todos podamos compartir nuestras experiencias y consejos, así que siéntanse en total libertad de comentar lo que opinan y contribuir a este "club de las que somos primerizas todos los días".

¿Por qué ese nombre?

De toda la información que he recabado a lo largo de estos años me he dado cuenta de contradicciones entre fuentes de consulta, madres y padres que comparten lo que les funciona y otros a los que eso no les parece la mejor opción.

Al analizar todo esto me he dado cuenta de que encaja muy bien con una comparación, y esa es el laberinto.

Diferentes caminos y posibilidades, pero al final todos buscamos llegar a la misma meta: Darle la mejor crianza posible, hacer de él un niño o una niña feliz, responsable y consiente.